Aunque solo tenéis como tarea obligada escuchar el primer movimiento, sería una pena que os perdieseis el 2º, ya que es una auténtica maravilla ;)
sábado, 12 de mayo de 2012
Concierto nº2 de Rachmaninov
Este semana vais a escuchar uno de los conciertos para piano y orquesta más famosos del repertorio, el 2º de Rachmaninov. Sé que muchos lo conocéis pero considero que es otro "imprescindible" para cualquier músico, por lo que es escucha obligada en la asignatura. Este concierto se ha utilizado para muchas bandas sonoras, anuncios e, incluso, en alguna canción pop moderna. La interpretación corre a cargo de un magnífico pianista ruso, Arcadi Volodos.
Aunque solo tenéis como tarea obligada escuchar el primer movimiento, sería una pena que os perdieseis el 2º, ya que es una auténtica maravilla ;)
Aunque solo tenéis como tarea obligada escuchar el primer movimiento, sería una pena que os perdieseis el 2º, ya que es una auténtica maravilla ;)
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Este uno de mis conciertos favoritos, junto con el de Elgar para cello y el de Beethoven para violín. Es precioso!!! Me encantan especialmente los dos primeros movimientos. Y de ellos me gustan las armonías; los temas melódicos, tanto cuando los hace el piano, como cuando los hace la orquesta, como en la presentación del tema en el primer movimiento, tras la introducción del piano; o el solo de flauta al principio del segundo al que sigue uno de oboe y de clarinete, tras los que coge el tema el piano. Me gustan mucho también los diálogos entre el piano y otros instrumentos de la orquesta, como el que empiezan las violas en el 2:47 de este vídeo; o la parte que lo sigue, que es también un diálogo muy guapo entre el oboe y el piano-que hace al final una especie de arpegios en un registro agudo que me encantan-. Pero, sin duda, la parte que prefiero de este movimiento es su culminación, que empieza en el 7:00, y cómo se crea antes tensión para esperar su llegada, que no te defrauda (no a mí, al menos). Debe de ser una pasada tocar esta parte!!! O, por lo menos, escucharla en directo. ¿Sabéis que Arcadi Volodos viene el año que viene a Oviedo? Ojalá toque este concierto... La verdad es que no lo conocía, pero me gustó mucho esta interpretación, aunque estoy acostumbrada a la de Ashkenazy (que, por cierto, también viene la temporada que viene pero como director...). Aquí la dejo por si alguien la quiere ver: (es el primer mov solo, pero está en dos partes grabado)Merece la pena ;): http://youtu.be/mWOWb3xtfGE
ResponderEliminarhttp://youtu.be/TxPFyXi5XI8
Pd: vaya afortunado que es A.Volodos, no tiene ni que arpegiar los acordes del principio! Debe de tener unas manos... :)
A mí también me encanta este concierto, además los cellos tienen unos temas preciosos! Respecto a la obra: Rachmaninov (1873 – 1943) tuvo una juventud muy dura. Con nueve años murió su segunda hermana mayor y su padre se fue de casa. Ese mismo año entró en el Conservatorio de San Petersburgo y, aunque comenzó siendo un fracaso debido a su mal comportamiento (incluso repitió un año), enseguida empezó a hacerse evidente su talento (más en composición que en piano).
ResponderEliminarEn 1895, cuando tenía más o menos 22 años compuso su Primera Sinfonía que ahora es muy valorada, pero que cuando se estrenó fue un fracaso, porque el director, Glazunov, estaba borracho (esto ya nos lo contó Belén en clase). Esto, sumado a las anteriores desgracias familiares, hizo que Rachmaninov entrara en una depresión que le impidió componer.
Unos años después, en 1900, fue al doctor Nikolái Dahl, quien le curó de su depresión y le hizo volver a ganar confianza en sí mismo. Ese año ya estrenó el segundo y el tercer movimiento del Concierto para piano Nº2, y al año siguiente, el primero. Se lo dedicó a su doctor en señal de agradecimiento y fue un éxito.
Este concierto tiene tres movimientos rápido – lento – rápido. El primer movimiento tiene una estructura ternaria reexpositiva A-B-A’. En el primer tema se pueden apreciar rasgos nacionalistas con elementos de carácter ruso en las cuerdas, mientras el piano acompaña con acordes arpegiados en tresillos; y románticos (pues él intentaba seguir las tendencias del Romanticismo, a pesar de que el movimiento había tenido su auge unas décadas antes) como las frases largas y líricas, no cuadradas, la tonalidad menor (Do menor)… aunque la armonía es quizás más compleja que la de los compositores anteriores.
Respecto a la versión: nunca había escuchado ni oído hablar de este pianista, pero me gusta mucho. Yo también estoy acostumbrada a la versión de Ashkenazy que en este movimiento es más rápida. También escuché la de Kissin y, al menos para el primer movimiento, es la que más me gusta. Casi siempre propongo la alternativa de Kissin, pero esque gracias al blog lo empecé a conocer y cada vez me gusta más, especialmente para obras como esta tan dramáticas y enérgicas. Aquí la pongo: http://www.youtube.com/watch?v=4Ud_wGMXRnQ
Esta obra fue la que supuso para Rachmaninov ganarse el reconocimiento y su fama posterior tras recuperarse de la dura depresión que había sufrido tras la mala acogida y crítica del estreno de su primera sinfonía (por lo del director que hablamos en clase en estado ebrio), dedicándola a su psiquiatra (Nikolai Dahl) que tanto le había ayudado.
ResponderEliminarEs una obra preciosa y muy conocida, además de por su gran calidad también para muchos por el hecho de que se ha utilizado algunas de sus melodías como tema principal en varias películas.
El movimiento que más me gusta personalmente es el segundo tanto la parte del piano como los solos de la orquesta; aunque el principio de este primer movimiento con el diálogo entre el piano y las cuerdas también es muy bonito. Y como no, en el minuto 7’ la mejor parte, para mí, de toda la obra, con mucha fuerza y brillantez tanto en el piano como en la orquesta seguido de un solo fantástico del piano.
También destacar sobre el minuto 9’ el diálogo entre el piano y las cuerdas, este más melódico y dulce, y los cambios de tema durante todo el movimiento entre el piano y algunas secciones de la orquesta que son varios a lo largo de él, ya que constituyen la base de su melodía.
Con respecto al pianista no le conocía, pero me ha gustado mucho esta versión aunque sea más tranquila ya que tampoco podría decantarme entre ninguna de las muchas de este concierto, pero esta en particular me ha parecido muy buena.
Como ya hablamos en clase, Rachmaninovv es un compositor del siglo XX pero con un estilo muy propio del romanticismo. Este concierto en concreto, abre el nuevo siglo y se convertirá en en el más importante y más reconocido del compositor que le dará la fama como compositor, le ayudará a recuperar su confianza y superar definitivamente una depresión que llevaba arrastrando años, en parte debido al fracaso de su primera sinfonía estrenada cuatro años antes que este concierto. Como dice Belén, y también lo hablamos en clase, en agradecimiento le dedico a Nikolai Dahl, su médico, el concierto. Como anécdota, fue el propio Rachmaninovv quien estrenó su obra en 1901 con la orquesta dirigida por su primo.
ResponderEliminarMe encanta el inicio del concierto (Amaia, a mi también me da la mano jeje), como aumenta la tensión con esos acordes cada vez más amplios y con más sonido, y también el inicio de la orquesta. La armonía es muy compleja y se suceden constantemente modulaciones e inflexiones. Hay que destacar también el contraste entre los dos temas principales. Frente a la tensión y densidad sonora del tema inicial, le sigue un tema mucho más lírico y cantabile. La vuelta al tema inicial, a pesar de que la orquesta vuelve a interpretar lo mismo, el piano abandona el papel de acompañamiento con arpegios para interpretar una nueva melodía.
Impresionante concierto de Rachmaninov. Creo que ya había escuchado el primer movimiento de esta obra, pero no el segundo. Me encanta la fuerza en general de la obra, con muchos pasajes en los que colabora la orquesta completa, en especial me gustan los vientos metales.
ResponderEliminarDestacaría el inicio de la obra, en el que el intérprete transmite mucho sentimiento en esos acordes y la posterior desembocadura en la primera parte de la obra; aparte de eso, como ya se dijo antes, y me parece lógico, tambien destacaría del minuto 6 hasta el 7, en el que hay un notable crescendo, es una zona muy expresiva, tanto por parte de los violines como por parte del piano, y del minuto 7 en adelante mientras dura esa parte, que es la zona álgida de la obra.
Se agradece la zona lírica posterior, que es casi como un descanso de tanta orquesta junta. El final me ha gustado mucho, creando esa última tensión que tan buen sabor de boca te deja al escucharla terminar.
Sin duda Rachmaninov es un compositor con un estilo mucho más próximo al XIX que al XX. La orquestación, el dramatismo, las dinámicas y la armonía recuerda al estilo claramente romántico de compositores como Beethoven, Brahms o Berlioz. Sin embargo, es innegable la belleza de este espléndido concierto, muy difícil de interpretar no sólo por la complejidad técnica, sino también por su carácter sentimental y afectado.
ResponderEliminarDe lo más bonito que has puesto en el blog, la verdad. Lo cierto es que de Rachmaninov conozco poquísimo, me empecé a interesar por él cuando oí a Iyán tocar el momento musical nº3, que me gustó tanto que me animó a escuchar prácticamente todas sus obras. Y sin duda el concierto me sorprendió, porque no lo había escuchado nunca antes. Aunque la grabación que había escuchado era la de Sultanov con la Sinfónica de Londres, me encanta la interpretación de Volodos.
ResponderEliminarPoco puedo decir de un concierto que me parece tan redondo. El inicio es espectacular, tan cuidado hasta que por fin aparece el tema A, potente, con mucha presencia, muy apoyado en la orquesta, con un carácter agitado, con muchas modulaciones por progresiones hasta que por fin aparece el tema B, más calmado, lírico, y centrado en la parte del piano. Me gusta mucho el final del tema A porque es cortante, y en seguida aparece el B, como un remanso. Este segundo tema es muy melódico, romántico y dulce. Poco a poco se acelera el tempo hasta que se retoma el tema A aunque algo variado, porque la parte del piano destaca mucho más sobre la orquesta que al principio.
El final es arrollador, el cierre perfecto para una obra muy contrastante pero en la cual no hay excesos ni defectos, todo parece encajar y cada parte se equilibra con el opuesto.
Sergei Rachmaninov nació el 1 de abril de 1873 y falleció el 28 de marzo de 1943, su nacionalidad es rusa, y tal y como las fechas indican, es un músico perteneciente a la época más bien nacionalista, pero su música posee un conjunto de características propias del romanticismo. Ya el comienzo de este colosal concierto es vibrante, una introducción, unos buenos cimientos para el gran edificio que se alza en ellos. La orquesta comienza en una tesitura propia de la zona más bonita de las violas, por lo que es muy acogedor y a la vez con un cuerpo redondo, digamos con “más curvas”. Los diálogos realizados entre el solista y la orquesta, tanto con las cuerdas como con los vientos son fantásticos. Todos son el apoyo de los demás en un momento dado. Los solos del piano son tremendamente emotivos; me gusta mucho Arcadi Volodos. A mí me gustaría destacar, además del gran minuto 7 el minuto cuatro, el diálogo con el oboe (la cámara nos muestra al oboe… pero a mí me suena más a clarinete), al final del cual, el piano toca en la zona aguda, una zona de relajación, pero que consta de una gran belleza. Los vientos aparecen grandilocuentes para cerrar esta pequeña ‘etapa’ de la obra. A continuación, junto con la cuerda. El punto álgido, durante ese séptimo minuto es fantástico. Lo cierto es que la entrada de la trompa ha sido un poco desilusionante, pero siempre corres el riesgo de la afinación. Las zonas en las que los chelos salen por encima de la orquesta son mágicas, y hasta prácticamente al final, acompañan con gran presencia al piano. El final de este movimiento es un poco misterioso, pero fuerte y con clase. Ya conocía esta obra y me ha gustado mucho escucharla otra vez.
ResponderEliminarA pesar de ser un compositor del siglo XX, se nota claramente el estilo romántico del músico, melodía amplia, libertad rítmica..
ResponderEliminarMe gusta mucho el como inica el concierto, con fuerza, seguridad, decisión.
Al pianista no le conocía pero me parece que tiene una perfecta fusión con la orquesta.
No conocía la obra,la cual me parece muy compleja, y me ha gustado mucho, la parte que más me gusta es sobre el minuto 4.20 cuando el piano y el oboe tocan a la vez, y después van saliendo los demás intrumentos.
El viernes fui al Jovellanos a un concierto de los alumnos que ganaron un concurso (no me acuerdo cuál era). Entre ellos tocaba Miguel de violín, que hasta este año que marchó para Gijón tocaban en Oviedo así que a lo mejor lo conocéis. Él tocó el concierto de Barber para violín y lo hizo genial. También había otro chico, que supongo que tendría entre 17 y 18 años de piano que tocó este concierto de Rachmaninovv y me dejó alucinado! ¡Impresionante! Una pena que no lo vierais, a ver si consigo hacerme con la grabación... del concierto.
ResponderEliminarMe alegro por Miguel, aunque solo lo conocía de verlo tocar un par de veces aquí. Al otro chico lo escuché en un curso de piano que hice el mes pasado, donde tocó precisamente ese concierto y me pareció buenísimo. Yo creo que ese chaval va a llegar lejos, ya que tiene un nivel altísimo y ¡solo está en 5º de Grado Medio! Por cierto, su padre es profesor de violín ;)
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